Prueba de conducción: Porsche Taycan

Tesla ha sentado las bases de los coches eléctricos de altas prestaciones. Pero faltaba en el mercado un verdadero deportivo eléctrico. Porsche tenía que hacer historia con los coches eléctricos. Cuando anunciaron el Taycan en forma de concept car Mission E, los puristas de la marca alemana (otra vez) clamaron blasfemia. Pero ahora es el momento de averiguar cuánto vale realmente este primer Porsche 100% eléctrico de la era moderna. Entonces, ¿es una prueba? ¿Un golpe maestro? Lo averiguaremos ahora mismo.

El Taycan, oops, EL Taycan. Sí, es un coche con nombre masculino, a diferencia de un BMW M3. El nombre de este coche eléctrico procede de una lengua de origen turco y significa «pequeño caballo brioso». ¿Una promesa? Eso espero al descubrirlo dentro del PEC (Porsche Experience Center Le Mans). Y si te interesan los coches de ocasión, te recomendamos el concesionario de coches de segunda mano en Madrid Crestanevada.

En cualquier caso, su aspecto no deja indiferente. ¿Un Porsche? Sí, no cabe duda, lo es. En primer lugar, gracias a sus faros de 4 diodos, como todos los nuevos modelos de la marca. Los guardabarros delanteros altos dan la impresión de tener un 911 delante desde ciertos ángulos. Como el motor de combustión está obviamente ausente bajo el capó (a diferencia de un Panamera), los diseñadores pudieron ahuecar al máximo la carrocería para acercarse lo más posible al espíritu de la leyenda de Stuttgart.

En la parte inferior, las aletas dinámicas permiten dirigir el flujo de aire a los frenos según sea necesario para mantenerlos fríos, o pueden cerrarse para favorecer un Cx récord de 0,22.

El perfil no oculta su relación con el 911, con una línea atemporal y una altura muy baja de 1,37. No busque más, no hay nada más bajo en este segmento. El coche es ancho: 1,96 m, es decir, 3 cm más que un Panamera, que está en el segmento superior. Sin embargo, es 6 cm (4,96 m) más corto que el Panamera en longitud. Si recuerdas la Misión E, hay una particularidad que te llamará la atención. Sí, la ausencia de puertas delanteras. Porsche abandonó esta solución porque suponía añadir casi 40 kg en diversos refuerzos.

En la parte trasera, la banda iluminada causa impacto. No soy un gran fan de este tipo de diseño, pero debo admitir que es impresionante. Y cuando te acercas, puedes ver una placa de circuito falsa detrás del nombre de la marca que te recuerda que se trata de un coche 100% eléctrico. Al igual que el 911, el Taycan cuenta con un alerón activo con modo de autonomía para mejorar el Cx.

En el interior, el ADN de la marca está definitivamente presente. Salvo que el futuro da otro paso adelante en comparación con los ya muy modernos 992 y Panamera.

Delante de sus ojos, ¡tres o incluso cuatro pantallas! El clásico cuadro de instrumentos se sustituye aquí por un modelo completamente digital y curvado de 16,8 pulgadas. La ventaja: puedes elegir tu expositor a la carta. La pantalla central PCM (Porsche Communication Management) de 10,9 pulgadas puede duplicarse (como opción) delante del acompañante. La última pantalla se encuentra en la consola central y sirve de acceso directo ergonómico (gracias a la retroalimentación háptica) a los controles esenciales (climatizador, asientos, etc.).

La disposición y el diseño son todos horizontales y recuerdan claramente al 992 y a los 911 en general.

El acabado es perfecto. Los materiales son de alta calidad y se ajustan perfectamente. La impresión de calidad es real y, como ventaja añadida, el acabado en bronce de nuestro modelo de pruebas contrasta a la perfección con el ambiente oscuro y deportivo que reina aquí.